miércoles, 7 de febrero de 2007

REFLEXIONES ACERCA DEL ESTUDIO DEL HEBREO BIBLICO

Enseñaos diligentemente, y mi gracia os acompañará, para que seáis más perfectamente instruidos en teoría, en principio, en doctrina, en la ley del evangelio, en todas las cosas que pertenecen al reino de Dios, que os es conveniente comprender; de cosas tanto en el cielo como en la tierra, y debajo de la tierra; cosas que han sido, que son y que pronto han de acontecer; cosas que existen en el país, cosas que existen en el extranjero; las guerras y perplejidades de las naciones, y los juicios que se ciernen sobre el país; y también el conocimiento de los países y reinos, a fin de que estéis preparados en todas las cosas, cuando de nuevo os envíe a magnificar el llamamiento al cual os he nombrado y la misión con la que os he comisionado.

(Doctrina y Convenios 88:78-80.).

¿Por qué aprender hebreo?
Estudiar el Tanâkh[1] en hebreo es una gran manera de obtener conocimientos muy especiales en materia de instrucción histórica, religiosa e idiomática. Aunque nuestras traducciones castellanas son notablemente buenas, y aunque existen muchas obras que tratan de las Escrituras Hebreas, el estudiarlas en la lengua original proporciona conocimientos frecuentemente extrañados en lo que se refiere a la naturaleza de Dios y Su plan para la humanidad. A través de los siglos, los movimientos religiosos tradicionales han introducido enormes errores en la de otra manera pura y continua doctrina y práctica que han venido directamente de Dios a Sus profetas desde la fundación del mundo[2]. Por medio de estudiar el Tanâkh en hebreo, uno puede comprender y entender el significado original de las palabras. Uno puede ser capaz de ver cómo los traductores frecuentemente escogieron equivalentes castellanos que equipararon con sus nociones preconcebidas con base en las filosofías tradicionales. Aunque deberíamos honrar a aquellos que preservaron las Escrituras y las hicieron obtenibles y accesibles en nuestra lengua nativa, deberíamos también reconocer que ellos son humanos, sujetos a las humanas pasiones, y, por lo tanto, estuvieron sujetos a traducir de acuerdo a sus propios paradigmas y el pensamiento de su tiempo. Las doctrinas profundas y esenciales de la salvación se registran en el Tanâkh, tal como fueron conocidas a Adán, Abrahán, Noé y Moisés. La clave para entender esas doctrinas es el estudio y la fe y la más importante revelación por el poder del Espíritu Santo.

Las filosofías humanas abundan, pero la mayoría son erráticas. Y, en el análisis final, las filosofías humanas suelen ser contrarias al conocimiento y la doctrina que se enseñan en las Escrituras inspiradas. Para evitar el peligro de la doctrina incorrecta, nosotros debemos estudiar estas cosas con nuestro mejor esfuerzo, y entonces confiar en la promesa del Señor para contestar nuestras preguntas: “Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá.” (Mateo 7:7; Versión Reina-Valera Revisada de 1960), es el programa del Señor para responder nuestras preguntas personalmente. Como el apóstol Pedro enseña, “Entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de particular interpretación; Porque la profecía no fué en los tiempos pasados traída por voluntad humana, sino los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados del Espíritu Santo” (2 Pedro 1:20, 21; Versión Reina-Valera Revisada de 1960), así mismo nosotros deberíamos reconocer que la interpretación viene por el poder del Espíritu Santo. Después de ‘estudiarlo en nuestra mente’, uno queda habilitado para llevar sus preguntas directamente al Señor. “Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, demándela a Dios, el cual da a todos abundantemente, y no zahiere; y le será dada.” (Santiago 1:5; Versión Reina-Valera Revisada de 1960.).

Reproducción de los primeros versículos del capítulo 1 de Génesis en caracteres hebreos cuadrados o modernos. La puntuación, esto es, los puntitos y rayitas que se observan, corresponden a las marcas introducidas para indicar las vocales, la entonación y la acentuación de las palabras.

La promesa de Moroni es verdadera de todo estudio de las Escrituras: “He aquí, quisiera exhortaron que cuando leáis estas cosas, si Dios juzga prudente que las leías, a que recordéis cuán misericordioso ha sido el Señor con los hijos de los hombres, desde la creación de Adán hasta el tiempo en que recibáis estas cosas, y que lo meditéis en vuestros corazones. Y cuando recibáis estas cosas, quisiera exhortaros a que preguntéis a Dios el Eterno Padre, en el nombre de Cristo, si no son verdaderas estas cosas; y si pedís con un corazón sincero, con verdadera intención, teniendo fe en Cristo, él os manifestará la verdad de ellas por el poder del Espíritu Santo; y por el poder del Espíritu Santo podréis conocer la verdad de todas las cosas.” (Moroni 10:3-5.). Uno debería usar siempre este principio como su guía al estudiar las Escrituras Hebreas. En Internet uno puede encontrar que hay mucho que es realmente interesante y edificante, algunas cosas que son ciertas y muchas que pueden confundir a las personas. Por eso es importante usar sabiduría. Y la sabiduría que lo es realmente viene de Arriba. “¿Quién es sabio y entendido entre vosotros? Muestre por la buena conducta sus obras en sabia mansedumbre. Pero si tenéis celos amargos y contención en vuestro corazón, no os jactéis, ni mintáis contra la verdad; porque esta sabiduría no es la que desciende de lo alto, sino terrenal, animal, diabólica. Porque donde hay celos y contención, allí hay perturbación y toda obra perversa. Pero la sabiduría que es de lo alto es primeramente pura, después pacífica, amable, benigna, llena de misericordia y de buenos frutos, sin incertidumbre ni hipocresía.” (Santiago 3:13-17; Versión Reina-Valera Revisada de 1960.). Recuerde que uno siempre estará aprendiendo, en esta y en todas las cosas, y que en todo se debe colar la información para separar la verdad del error. Uno puede encontrar muchos sitios en Internet que comienzan de manera razonable, pero que rápidamente se dirigen hacia la confusión y el error, y en algunos casos uno puede darse cuenta fácilmente de que están diseñados especialmente para arrastrar tras sí a personas que de otra manera son fieles al Evangelio y a la verdadera doctrina. La siguiente escritura es mi guía, y pienso que es el mejor consejo que uno puede dar: “Y lo que no edifica no es de Dios, y es tinieblas.” (Doctrina y Convenios 50:23.). También, mientras nosotros estamos en el tema de reconocer la verdad y la revelación, déjeseme referirme a otro concepto. Cuando discutí este tema una vez con un anti mormón, yo le dije que sentir no es revelación ni el poder del Espíritu Santo, y que la Biblia es la única medida de la verdad. Este individuo hizo algunos comentarios sobre nuestro pensamiento santo de los últimos días, algo que es verdad en cuanto a lo que es el sentimiento y el ardor en nuestro corazón. En una emisión de radio titulada The Great Plan of Happiness and Personal Revelation[3], que yo recomiendo leer, élder Boyd K. Packer, un apóstol del Señor Jesucristo, dijo: “Yo aprendí hace tiempo que el conocimiento espiritual es descrito en un lenguaje diferente que el del conocimiento secular. […] Desde entonces nunca me he perturbado o avergonzado porque no pude explicar en palabras simples todo lo que yo sé espiritualmente, porque el Poder del Espíritu Santo no es solo un ‘sentimiento’. El Señor dice ‘Sí, he aquí hablaré a tu mente y a tu corazón por medio del Espíritu Santo que vendrá sobre ti y morará en tu corazón.’ (Doctrina y Convenios 8:2.). Es más que un sentimiento, es una confirmación tanto en nuestra mente como en nuestro corazón. Esta doctrina es tan prevaleciente en la Biblia como en Doctrina y Convenios.

“El corazón del entendido adquiere sabiduría; Y el oído de los sabios busca la ciencia.” (Proverbios 18:15; Versión Reina-Valera Revisada de 1960.).

El Alefbét o Alfabeto Hebreo
El alefbét o alfabeto hebreo, consiste de 22 caracteres, todos los cuales son consonantes. Aunque las vocales eran obviamente necesarias a fin de pronunciar las palabras, no se las usaba en los textos hebreos antiguos, como tampoco en otros lenguajes semíticos. Dado un conocimiento básico de la traducción del idioma no es muy difícil esta frase sin vocales: PD STD LR ST? Existen varias posibles palabras para cada juego de consonantes, pero, del contexto uno puede fácilmente interpretar ¿Puede usted leer esto? Las vocales fueron introducidas en el texto del Tanâkh por un grupo de eruditos judíos de las Escrituras a quienes se ha dado en llamar masoretas. Esta introducción de vocales no tuvo lugar hasta después que el idioma hebreo se había convertido en una lengua muerta por siglos. En un sincero esfuerzo por conservar los textos sagrados originales, los masoretas introdujeron signos debajo y (en algunos casos) encima y entre los caracteres originales. Como puede verse en los documentos que se proporcionan con este curso básico de hebreo, las vocales son muy pequeñas y fueron dispuestas para que ni siquiera desorganizaran la distancia ente los caracteres. Mire la carta que se adjunta a continuación para ver todas las consonantes hebreas, su nombre, su sonido aproximado, su valor numérico y su significado tradicional.

Tabla Para el Estudio fácil del Alefbét
Nota: los valores numéricos y los ‘significados’ no son necesarios para el estudio del hebreo bíblico. Pero para aprender el alefbét hebreo puede resultar provechoso asociar tanto el significado como el valor numérico con el caracter para hacer más fácil el memorizar.

Variaciones en los Caracteres
Los caracteres mostrados arriba están en la forma ‘cuadrada’ moderna. El hebreo moderno impreso y muchas obras antiguas impresas en hebreo usan los caracteres cuadriformes. Algunos textos de los llamados Rollos del Mar Muerto, usan los caracteres llamados paleohebreos cada vez que aparece el Tetragrámaton o Nombre Sagrado de Dios, compuesto por las letras hwhy. Los antiguos israelitas consideraron el Nombre de Dios en muy alta consideración y como absolutamente sagrado. Con el tiempo se introdujo una superstición que prohibió la pronunciación del Nombre Inefable no solamente en el habla cotidiana, sino también en los servicios religiosos y siempre se le sustituyó por palabras comunes, sustantivos, tales como Adhonây (Señor) y ‘Elohîm (Dios). En los días del Templo de Herodes era pronunciado únicamente por el sumo sacerdote en el Qodêš Qodešîm, el Santísimo, del Templo una vez añ año, en el Yôm Kippûr, el Día del Perdón. Una tradición judía dice que cuando venga el Mašîakj, el Ungido, éste sería capaz de enseñar el significado perfecto de las Escrituras, incluyendo el significado de los espacios entre las letras. Nosotros, los cristianos, sabemos que el Mašîakj, el Ungido, ha venido y que “fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad. Juan dio testimonio de él, y clamó diciendo: Este es de quien yo decía: El que viene después de mí, es antes de mí; porque era primero que yo. Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia. Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo. A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.” (Juan 1:14-18; Versión Reina-Valera Revisada de 1960.).

Como ya se ha mencionado, el el hebreo moderno impreso usa también los caracteres cuadrados mostrados anteriormente. Esos caracteres también pueden ser escritos a mano, los cuales como uno puede imaginarse, lucen significativamente diferentes debido a la dificultad de formar los caracteres cuadriformes con un lápiz. El Parson's Technology Hebrew Tutor[9] muestra algunos de los caracteres manuscritos y cómo escribirlos.

Génesis 1:1, como aparece en la lección 11 de este curso. La primera línea corresponde a los caracteres llamados semíticos o protosinaíticos (que algunos opinan que fueron los utilizados originalmente por Moisés para escribir la Torâh). La segunda línea corresponde a caracteres hebreos antiguos (a veces llamados fenicios o cananeos). La tercera línea corresponde a los caracteres llamados paleohebreos. La cuarta línea corresponde a los caracteres hebreos cuadrados o modernos. La quinta línea presenta una transcripción fonológica del texto hebreo presentado en las líneas anteriores. La sexta línea presenta una traducción literal, palabra por palabra, del texto hebreo. Y, finalmente, la séptima línea presenta una propuesta de traducción castellana literal.

En las lecciones que hemos preparado, el estudiante podrá aprender a reconocer diferentes clases de juegos de caracteres hebreos, desde los llamados protosinaítico (mejor dicho, protohebreo) hasta los cuadriformes, pasando por los llamados paleohebreos y los hebreos antiguos. Esto es particularmente cierto en lo que se refiere a la lección 11, donde se presenta Génesis 1:1 en varios juegos de caracteres, como el protosinaítico y el paleohebreo. Pero ya en las páginas 2 y 3 de la lección 1, se presenta parte del capítulo 1 de Génesis en caracteres protosinaíticos y paleohebreos. Este curso no pretende convertirlo a uno en erudito y experto en la lengua hebrea, sino adquirir un conocimiento básico funcional, esto es, que le permita entender, conocer, comprender y saber lo básicamente necesario como para reconocer las letras hebreas, al menos una docena de palabras básicas, así como su significado. Y, sobre todo, aprender a exponer tanto para sí mismo como para los demás todo eso, su traducción, y su interpretación. Todo esto desde el punto de vista gramatical. Esta sección de las clases de Instituto de Religión no pretende inculcar doctrinas o enseñanzas religiosas específicas. Su objetivo es gramatical. Porque desde el punto de vista gramatical es que se estudiarán las Escrituras antiguas para los fines de exponer las bases de ciertas doctrinas o enseñanzas con respecto a tales o cuales temas específicos que se basan en la exégesis de los textos y de las palabras a partir de las palabras mismas.

La Lectura del Hebreo
La primera regla que uno nunca debe olvidar es que el hebreo se lee desde la derecha hacia la izquierda. La palabra אֱלֹהִים, ‘elohîm, que literalmente significa dioses, se escribe de derecha a izquierda utilizando los caracteres hebreos ‘âlef, lâmed, hê’, yôhdh, mêm. Nótese que en esta palabra la letra mêm es diferente, pero esto se debe a que es una forma final del caracter. (Véase la tabla de caracteres, en la página 6. Las letras kâhf, mêm, nûn, pê’ y tsâde tienen una forma final. Cuando una palabra termina en cualquiera de esas letras, entonces se escribe en la llamada ‘forma final’. Habrá notado que la tercera palabra del Tanâkh o Biblia Hebrea es אֱלֹהִים, ‘elohîm,. (Génesis 1:1.). Si usted tiene el Plug-in DjVu instalado, cliquée aquí para ver la Online 1839 Biblia Hebraica[10], luego cliquée en el enlace para las páginas 0-1 para ver Génesis 1:1. En la Online 1839 Biblia Hebraica, puede verse que אֱלֹהִים, ‘elohîm, es, en efecto, la tercera palabra. Note también la inclusión de los puntos vocálicos masoréticos.

Para los nuevos estudiantes de las Escrituras Hebreas, Génesis 1:1 es muy revelador. En castellano se traduce: “En el principio creó Dios los cielos y la tierra.” (Versión Reina-Valera, edición de estudio, 1995.). Esta traducción es muy literal, muy apegada al texto hebreo original, pero hay algunas cosas que uno debería tomar en cuenta. Lo primero es que la palabra hebrea בָרָא, barâ, significa crear, modelar u organizar. (Vea su próximo recurso importante, The Brown-Driver-Briggs Hebrew and English Lexicon[11].). Los traductores y luego los revisores de la Versión Reina-Valera, por ejemplo, eligieron la palabra española crear. Durante las tribulaciones que sobrevinieron a la Iglesia cristiana primitiva, temprano en los siglos II y III d. de J.C., muchas de las doctrinas bíblicas originales fueron alteradas o decididamente cambiadas, para hacerlas concordar con las enseñanzas de los filósofos paganos griegos Platón y Aristóteles. Uno de los conceptos inventados y enseñados por los griegos fue el de una creatio ex nihilo. Esta locución latina significa crear de la nada. Muchos han señalado que el registro original de la creación escrito por Moisés no habla de una creatio ex nihilo como tal. Más bien confirmaría lo que dice el registro de Abraham: “Descenderemos, pues hay espacio allá, y tomaremos de estos materiales y haremos una tierra sobre la cual éstos puedan morar.” (Abraham 3:24.). En ningún lugar del Tanâkh hay palabra alguna del Señor para vindicar la idea de una creatio ex nihilo[12].

Por medio de examinar la palabra hebrea אֱלֹהִים, ‘elohîm, uno puede entender el uso de las palabras nosotros, ellos y nos en tantos lugares del libro de Génesis y en particular en lo que se refiere a los relatos de la Creación y del Paraíso como pertenecientes a la Deidad. Todas las palabras hebreas que terminan en µy, im, son plurales. אֱלֹהִים, ‘elohîm, literalmente significa y se refiere a dioses o, como se entiende en el mormonismo y en el catolicismo romano y otras vertientes de la cristiandad, la Deidad,[13] consistente del Padre (a veces referido simplemente como אֱלֹהִים, ‘elohîm, ya que la conclusión plural puede denotar una magnificación de un singular significando algo así como el Dios Todopoderoso), el Hijo, o Jehová Elohim, quien es Jesucristo, y el Espíritu Santo, o Rúaj Elohim. Ha de notarse que inmediatamente después de la caída de Adán, Dios es raramente referido simplemente como ‘elohîm, sino que, en vez de eso, el hombre comienza a tratar explícitamente con el miembro de la Deidad conocido por el Nombre y título יְהוָה אֱלֹהִם, Yahwêh ‘Elohîm[14], comúnmente traducido al español como Jehová Dios en la Versión Reina-Valera. Este es Jesucristo, el “Gran YO SOY” y el Único autorizado por el Padre para ser el Mediador para la humanidad[15].[16]

“Si como a la plata la buscares, y la escudriñares como a tesoros, entonces entenderás el temor de Jehová, y hallarás el conocimiento de Dios. Porque Jehová da la sabiduría, y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia.” (Proverbios 2:4-6; Versión Reina-Valera Revisada de 1960.). Rollo de la Torâh abierto. Hasta el día de hoy, los judíos tratan con mucho respeto las copias de las Escrituras. La Torâh corresponde a los primeros cinco libros de las Escrituras Hebreas o Tanâkh, esto es, lo que actualmente se conoce más comúnmente como Génesis, Éxodo, Levítico, Número y Deuteronomio.

Enseguida, uno encuentra otras palabras interesantes. הַשָּׁמַיִם, ha-shamâyim, que significa los cielos, y הָאָרֶצ, ha-‘ârets, que quiere decir la tierra. Nótese, en cualquier edición impresa del texto hebreo el artículo definido, h, hâ, que precede a ambas palabras en este texto. Esta palabra, h, hâ, puede significar, de acuerdo al contexto, el, la, los, las.[17] A medida que uno vaya avanzando en este curso y vaya aumentando su conocimiento del hebreo, descubrirá otras letras (como la w, waw) que hacen diferentes partes de las oraciones, como, por ejemplo, a, para, y. También irá aprendiendo las nociones básicas de los tiempos verbales, los sustantivos propios, sustantivos comunes, etc. De nuevo, para los usuarios de computadores tengo que recomendar que obtengan una copia de Parsons Hebrew Tutor[18]. Este programa ayuda a aprender rápida y fácilmente las reglas del hebreo. Alternativamente, uno puede adquirir algún libro impreso en alguna de las muchas librerías cristianas que existen.[19] Sin embargo, para las cosas básicas que iremos viendo y aprendiendo, no es absolutamente necesario ni imprescindible. Bastará con lo que se vaya enseñando en las lecciones que se han diseñado.

Aprender las reglas del idioma, construirse un vocabulario más amplio y aprender a usar los léxicos que se proporcionarán, son los pasos iniciales a capacidades cada vez mayores en el campo del aprendizaje y de la traducción. Más importante todavía es aprender a sentir y reconocer la revelación por el Poder del Espíritu Santo. Donde otros (y me incluyo) son ignorantes, el Espíritu de Dios puede hacerlo a uno experto. Nunca debe olvidar uno que debe poner su confianza en Él, y no en el “brazo de carne”.

La Enseñanza del Profeta José Smith
Como se ha visto en estas páginas introductorias, se ha estado proporcionando variada, bastante y circunstanciada información acerca del hebreo bíblico. La idea es ir interiorizando a la persona en cuestiones básicas de manera facilitada, sin entrar en mayores detalles ni en complicaciones que son el campo de los especialistas.

Pero si bien el objetivo primario es el hebreo bíblico desde el punto de vista gramatical, no se han omitido algunas referencias, aunque sean muy de pasada, sobre cuestiones o tópicos que tienen que ver con lo doctrinal.

No es necesario que se haga aquí una declaración circunstanciada sobre el hecho de que existen variadas y múltiples aproximaciones a casi cada declaración o frase que se encuentra en el Tanâkh, desde lo que dice o no dice Génesis 1:1 hasta el significado de la cantidad de consonantes en una palabra y la suma de los espacios en blanco entre las palabras.

Pero en este curso de hebreo no se entra en el campo de la doctrina y la enseñanza. Se respeta toda doctrina o dogma relacionado o basado en el texto hebreo de las Escrituras y se entiende y acepta que es responsabilidad y privilegio de cada corriente de pensamiento la interpretación doctrinal y la enseñanza que afecten a tal o cual palabra, frase o declaración tanâkhica. Ese no es el campo de este curso. Pero se entiende, también, que debe al menos mencionarse que existen varias ponencias al respecto y, si es necesario, hacer una descripción más o menos pormenorizada en algunos casos y aunque, repito, no sea éste el tema de este curso.

Para entender el punto de vista doctrinal de la Iglesia mormona, pues, se proporciona la siguiente cita, que se ha tomado de Enseñanzas del Profeta José Smith, edición de 1975[20].

El Significado de las Escrituras Hebreas

“Voy a comentar la primera palabra hebrea que se halla en la Biblia; voy a hacer comentarios sobre la primera frase de la historia de la creación en la Biblia—Berosheit. Deseo analizar la palabra: Baith: en, por, mediante, y todo lo demás; Rosh, la cabeza; Sheit: terminación gramatical. Cuando el hombre inspirado lo escribió, no le puso la palabra baith. Un judío sin autoridad se la añadió; le pareció mal gusto que empezara a hablar acerca de la cabeza. Al principio decía: “El cabeza, el principal de los Dioses hizo aparecer a los Dioses.” Ese es el significado verdadero de la frase. Baurau significa hacer aparecer, manifestar. Si no lo creéis, tampoco creéis al varón instruído de Dios. Los sabios no pueden enseñaron más de lo que yo os he dicho. Así que el Dios principal hizo aparecer a los Dioses en el gran concilio.
“Ahora voy a trasladar y simplificar la frase. ¡Oh abogados, doctores y sacerdotes que me habéis perseguido, quiero que sepáis que el Espíritu Santo sabe algunas cosas tan bien como vosotros! El Dios Principal convocó a los Dioses y se reunieron en concilio para crear el mundo. Estos grandes Consejeros se sentaron a la cabeza, allá en los cielos y presenciaron la creación de los mundos que fueron creados en esa época. Cuando digo doctores y abogados, me refiero a los doctores y abogados de las Escrituras. Hasta aquí lo he hecho[21] sin explicación, para que se incomoden los abogados, y todos se rían de ellos. A algunos sabios doctores se les ocurrirá decir que las Escrituras declaran tal y tal cosa; que debemos aceptarlas precisamente como están y que no deben ser alteradas. Pero os voy a mostrar un error que contienen.
“Tengo una versión antigua del Nuevo Testamento en latín, hebreo, alemán y griego. He estado leyendo el alemán, y veo que es la traducción [casi][22] más correcta, y la que mejor concuerda con las revelaciones que Dios me ha dado durante los últimos catorce años. Se refiere a Jacobo, hijo de Zebedeo. En inglés sería Jacob. En el Nuevo Testamento [en inglés][23] se ha traducido por James [Santiago][24]. Pero si se dieron las llaves a Jacobo, bien podríamos hablar acerca de Santiago por toda la eternidad y jamás obtener las llaves.[25] En el versículo 21 del cuarto capítulo de Mateo, la antigua traducción alemana da el nombre de Jacob [Jacobo] en lugar de James [Santiago].


“Los doctores (me refiero a los doctores de la ley, no los médicos) dicen: “Si predicas algo que no concuerde con la Biblia te acusaremos de traición.” ¿Cómo podemos escapar la condenación del infierno, a menos que Dios esté con nosotros y nos dé revelaciones? Los hombres nos sujetan con cadenas. El latín dice Jacobo, que significa Jacob; el hebreo dice Jacobo, el griego dice Jacobo y el alemán dice Jacobo. Aquí pues tenemos el testimonio de cuatro contra uno. Doy gracias a Dios que tengo este libro viejo; pero más le doy gracias por el don del Espíritu Santo. Ciertamente podré tener el libro más antiguo del mundo, pero [también] tengo en mi corazón el libro más antiguo, es decir, el don del Espíritu Santo. Tengo los cuatro testamentos. Venid, hombres sabios, y leed si podéis. No habría presentado este testimonio, si no hubiese sido para comprobar el significado de la palabra rosh, el cabeza, el padre de los Dioses. No habría hablado de ello, sino para mostrar que tengo razón.

El Concilio de los Dioses

“En el principio, el principal de los Dioses convocó un concilio de los Dioses; y se reunieron y proyectaron un plan para crear el mundo y poblarlo. Cuando empezamos a aprender de este modo, empezamos a conocer al solo Dios verdadero, y qué clase de ser tenemos que adorar. Si tenemos conocimiento de Dios, comenzamos a entender cómo allegarnos a El, y cómo hemos de pedir a fin de recibir una respuesta. Cuando entendemos la naturaleza de Dios, y aprendemos cómo allegarnos a El, entonces El empieza a manifestarnos los cielos y a explicar todas las cosas. Cuando estemos dispuestos a venir a El, también El estará dispuesto a venir a nosotros.
“Ahora quisiera preguntar a todos los que me escuchan, ¿por qué es que los hombres doctos que predican la salvación, dicen que Dios creó los cielos y la tierra de la nada? Es porque carecen de instrucción en cuanto a las cosas de Dios, y no tienen el don del Espíritu Santo; acusan de blasfemia al que contradice sus ideas. Si les decís que Dios hizo el mundo de algo, os llaman necios. Pero yo he recibido instrucción, y sé más que todo el mundo; por lo menos, el Espíritu Santo sabe, y El está dentro de mí, y El sabe más que todo el mundo; y yo me asociaré con El.

El Significado de la Palabra Crear

“Si preguntamos a los sabios doctores por qué dicen que el mundo fué hecho de la nada, ellos nos contestan: ¿No dice la Biblia que Dios creó el mundo? Y concluyen, por la palabra crear, que debe haber sido hecho de la nada. Pero la palabra crear vino del término hebreo baurau, que no significa crear de la nada, sino manifestar, dar forma, organizar, así como un hombre organiza los materiales y construye un barco.

“De manera que podemos deducir que Dios tenía a su disposición los materiales para organizar el mundo de todo aquel caos, es decir, materia caótica, que es elemento, y en el cual mora toda gloria[26]. Los elementos han existido desde que nosotros tuvimos existencia. Los principios puros de los elementos son principios que jamás pueden ser destruídos; pueden ser organizados, y reorganizados, mas no destruídos. No tuvieron principio, y no pueden tener fin[27].”

Ha de decirse, para beneficio de todos, que la anterior cita de lo enseñado por el profeta mormón José Smith de ninguna manera es un intento por establecer doctrina ni por hacer proselitismo ni propaganda a favor de una determinada concepción religiosa. Se trata de un ejemplo de aproximación doctrinal al tema de la creación solamente que puede servir en algunos casos como conocimiento de cultura general. Como se verá en las lecciones 6 y 11 principalmente, en este curso, desde el punto de vista gramatical, se sostiene una lectura literalista y hebraista del tema de la creación, en base a lo que el mismo texto dice y autoriza a decir. Y, de nuevo, es necesario decir, y tan claro como sea necesario, que en estas páginas se mantiene una absoluta neutralidad en cuanto a doctrina o enseñanza religiosa, respetándose todas. El objetivo de este curso es, como se ha indicado desde un principio gramaticalmente funcional. Dejamos el tema de las discusiones teológicas, doctrinales o dogmáticas para los que tienen eso como su objetivo. Por lo demás, católicos, protestantes, mormones y todos los demás, tienen una visión, una cosmología y un planteamiento doctrinal y dogmático que tiene como base y fundamento la revelación, la tradición y las definiciones dogmáticas, principalmente, según corresponda. Y los miembros de tales organizaciones religiosas no deben sentirse agredidos ni criticados porque se estudie gramaticalmente lo que dicen las Escrituras Hebreas.

Recursos Adicionales
Lo que viene enseguida es un intento por enumerar recursos que me han ayudado en el aprendizaje. Aprender hebreo trae un gran bagaje de conocimiento al estudio personal de las Escrituras. Espero que tal cosa le ocurra también a usted. Mientras pueda afrontarlo, todas las herramientas y recursos que pueda proporcionar estarán disponibles en forma gratuita. Por lo tanto, siéntase libre para escribirme solicitando los recursos que necesite para su estudio del hebreo bíblico. Recuerde que prácticamente no existe valla ni obstáculo alguno para el progreso en este campo. Por lo tanto, es posible que en el futuro cercano podamos contactarnos para intercambiar materiales de estudio. Hasta entonces, puede revisar los siguientes enlaces a recursos que espero le sean de verdadera y real utilidad.

· Parsons Technology's Hebrew Tutor[28]
· Libros que recomiendo de Amazon.com:
o The Brown-Driver-Briggs Hebrew and English Lexicon[29]
o Do it yourself Hebrew and Greek[30]
· The Online Hebrew Flash Cards[31]
· The Online 1839 Biblia Hebraica[32]
· F.A.R.M.S Research[33] es un excelente recurso para estudios similares

The Interlinear Bible: Hebrew/Greek/English, by Jay P. Green Sr.[34] es una Biblia interlineal, con una traducción literal en el margen y una traducción inglesa literal de cada palabra debajo del texto hebreo o griego. Las Biblias interlineales son un óptimo recurso para aprender hebreo. Vea http://www.netwaysglobal.com/index.html para un enlace a la edición interlineal de 1897, que cubre los diez primeros capítulos de Génesis. (Note que The Green Interlinear tiene un texto muy pequeño para permitir ponerlo en un libro. La traducción inglesa no usa el tan hermoso lenguaje de la Versión Autorizada, pero parece ser una traducción aceptable cuando se la compara con otras traducciones más modernas.).

Los siguientes enlaces no corresponden a todos los sitios que se pueden encontrar en Internet. En internet hay una gran cantidad de sitios que pueden hallarse con el uso de buscadores tales como Google. Los que se mencionan a continuación por lo general ofrecen enlaces a otros sitios, de manera que se puede seguir una línea casi interminable. Lo importante es que el estudiante de las Escrituras despliegue sentido común y paciencia a la hora de comenzar a investigar los recursos disponibles en Internet.

ACADEMIA BÍBLICA LINGÜÍSTICA: http://www.multilingual-publishing.com/_index.html.

ANCIENT HEBREW RESEARCH CENTER: http://www.ancient-hebrew.org

BETTER BIBLES BLOG: http://englishbibles.blogspot.com

BIBLE ATLAS ONLINE BY ACCESS FOUNDATION: http://www.anova.org/sev/atlas/htm

BIBLE TRANSLATION: http://www.geocities.com/bible_translation

BSW - YOUR GATEWAY TO EXEGESIS ON THE WEB: http://www.bsw.org

CANTILLED BIBLE: http://www.anastesontai.com/b-cantilee/en-cant.asp

CÓDICE DE ALEPO: http://aleppocodex.org/homepage.html

GRAMÁTICA HEBREA, GESENIO: http://www.adath-shalom.ca/gk_cont.htm

CURSOS DEL PROFESOR MARTÍN MORENO: https://www.upcomillas.es/personal/jmmoreno/cursos/index.htm

MECHON MAMRE: http://www.mechon-mamre.org/dli.htm

FREE BIBLE SOFTWARE: http://www.htmlbible.com/#free

HEBREO ANTIGUO: http://www.ancienthebrew.741.com

APRENDA HEBREO BÍBLICO: http://www.ancient-hebrew.org/7_home.html

ENLACES RELACIONADOS CON EL IDIOMA HEBREO: http://www.ancient-hebrew.org/1_links.html

HEBREO: http://www.mickshebrew.741.com/index.html

LA PÁGINA DEL TANAKH: http://www.iclnet.org/pub/resources/text/ipb-e/tanach/ipbe-tn.html

AULA DE BIBLIA: http://www.auladebiblia.com

FORO DE EXEGESIS BÍBLICA: http://www.foroexegesis.com.ar

GÉNESIS SEMÍTICO: http://www.ancient-hebrew.org/9_genesis.html

HEBREO BÍBLICO POR INTERNET: http://www.hebreobiblico.com

http://www.amazon.com/exec/obidos/ASIN/1878442821/hebrewlanguagere/o/qid=989856239/sr=2-2/104-2650217-8198306

Ya mencioné anteriormente la charla de élder Packer titulada The Great Plan of Happiness and Personal Revelation. Copias de esta charla están disponibles en BYU Speeches[35]. También pueden ser solicitados a speeches@byu.edu. Si decide solicitar dicha charla, debe proporcionar la siguiente información:
o Title: The Great Plan of Happiness and Personal Revelation
o Forum: Young Adult CES Broadcast given 7 November 1993
o Speaker: Elder Boyd K. Packer

Ahora, si lo desea, puede comenzar a estudiar hebreo siguiendo nuestro curso, o bien puede optar por seguir algún otro de los que se ofrecen en Internet o en centros especializados. Lo importante es que uno determine de antemano qué es lo que necesita o lo que busca, y qué es lo que espera de un curso de hebreo básico funcional.

Si desea recibir nuestro curso, simplemente envíenos un correo-e a afirchile@hotmail.com, indicando su deseo de que le remitamos el material de estudio. Si nos envía su dirección de correo tradicional, le enviaremos un disco compacto con el material necesario. De otra manera, le enviaremos solamente los módulos principales a través del correo electrónico, o le indicaremos la manera de bajar a su computador el material, o los materiales adicionales que tenemos disponibles en Internet. En todos los casos, trataremos de que reciba todo el material necesario para que avance. Al recibir el material es recomendable que primero que nada revise todo lo que se le envía, para que se forme una idea general. Pero lo que no es recomendable es que comience a estudiar las lecciones posteriores sin antes haber estudiado y entendido y comprendido cabalmente la primera de todas y de haber leído y/o estudiado los materiales adicionales que se le proporcionan, tanto en el disco compacto como en los enlaces a nuestros sitios, o a otros que recomendamos expresamente, para que se vaya formando una idea general básica de lo que es la cultura hebrea, así como su entorno semítico y las influencias externas.

Aquí es necesario insistir en lo que ya se ha dicho anteriormente. Este curso de hebreo básico está enfocado desde un punto de vista puramente gramatical y literario. En ningún caso puede tomarse como doctrinal. No existe ninguna intención de invadir el campo de lo doctrinal, el cual pertenece a quienes están autorizados para explicar las Escrituras desde el punto de vista de la fe que ha sido revelada y conservada como es propio. Por lo mismo, no existe ninguna intención de pretender establecer doctrina a partir de lo que se enseña aquí como gramática del hebreo bíblico. Y nadie debe sentirse ofendido ni agredido en sus creencias, dogmas y doctrinas por las ponencias gramaticales que aquí se expresan.

“Sabiduría ante todo; adquiere sabiduría; y sobre todas tus posesiones adquiere inteligencia.” (Proverbios 4:7; Versión Reina-Valera Revisada de 1960.).


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NOTAS:
[1] Tanâkh es el nombre que los judíos dan a la primera sección de las Santas Escrituras, la que va desde Génesis hasta Malaquías y que, comúnmente, en el mundo cristiano y occidental, se conoce como Antiguo Testamento. El nombre se forma con la primera letra de los nombres de las tres secciones de las Escrituras Hebreas, esto es, de Torâh (La Ley, o Pentateuco, los primeros cinco libros de Moisés), Nevi’îm (Los Profetas) y Kethuvîm (Los Escritos o Las Escrituras), por lo que el nombre Tanâkh puede entenderse como queriendo decir La Ley, Los Profetas y los Escritos. Algunos consideran que el Tanâkh podría ser referido mejor como Escrituras Hebreas en lugar de Antiguo Testamento, en vista de la connotación moderna de la palabra testamento, la que antaño significaba pacto o convenio, y parecía apropiada para designar a la primera parte de la Biblia como el Antiguo Pacto o Convenio Antiguo, ya que estaba centrada mayormente en el Pacto de la Ley que se dio en Sinaí por medio de Moisés a la nación de Israel. Pero en los medios judíos y hebraistas, esta primera parte de las Escrituras siempre se llamará Tanâkh.
[2] Poco después de aparecido el cristianismo, y mientras todavía los apóstoles y primeros discípulos estaban entrgados a la tarea de predicar las buenas nuevas o evangelio de Jesucristo, apareció una notable tergiversación del cristianismo puro original en la forma del gnosticismo, una corriente de pensamiento que contaminó de muchas maneras al cristianismo ya en los días de los apóstoles. El gnosticismo llegó a ser tan poderoso y permeó de tal manera a la Iglesia cristiana primitiva que muchas de las actuales doctrinas y enseñanzas de las iglesias y movimientos cristianos se derivan del gnosticismo, como la noción del celibato, el autoflagelo, la espiritualización y la negación de la corporeidad, la idea del regreso inmediato al cielo luego de la muerte, las restricciones alimenticias de carácter religioso, la observancia de ciertas festividades, así como también, entre muchas otras, la formación de un canon de escrituras propias consideradas sagradas.
[3] http://www.netwaysglobal.com/hebrew/intro.html#packer.
[4] Los ashkenazim llaman a esta letra héi.
[5] El nombre posterior de esta letra es vav. En general, algunos la transcriben por u, otros por v y aún otros por w. debe transcribirse por w, pero pronunciarla como u cuando se refiere al hebreo bíblico.
[6] Algunos la pronuncian como j, creando una confusión con la letra j, jéhth.
[7] Se pronuncia como la parte final de la palabra Ritz.
[8] Que se la pronuncie como s o como sh dependerá del puntito que lleve. Esto se verá en la lección correspondiente al alefbét.
[9] http://service.bfast.com/bfast/click/parsonstech?sourceid=575064&bfpid=4224&bfmtype=software
[10] http://www.netwaysglobal.com/biblia.
[11] http://www.amazon.com/exec/obidos/ASIN/1565632060/hebrewlanguagere.
[12] Existe, entre los teólogos y escriturarios de renombre de todo el mundo, y desde hace mucho tiempo, una gran controversia en cuanto a si Dios creó ex nihilo, es decir, a partir de nada, o si ya existía previamente la materia. Una obra muy completa acerca de este punto es Teología de la Creación, Juan Luis Ruiz de la Peña, 1986, Editorial Sal Terrae, Bilbao, España. “El presente libro ha sido redactado con la idea de que pueda servir de texto a quienes estudien el tema, dentro o fuera de los centros teológicos. Articulado en dos partes, la primera es una teología de la creación de corte estrictamente académico. Se tratan en ella la teología bíblica del Antiguo y del Nuevo Testamento (capítulos I y II), la historia de la doctrina (capítulo III) y la reflexión teológica (capítulo IV).” (Op. cit., página 12.). Sin duda, es una excelente obra, de orientación católica, que ha de ser tenida en cuenta al momento de estudiar el tema de la creación del universo, y de la tierra en particular.
[13] Algunos han visto en el uso del plural ‘elohîm una referencia a la doctrina de la trinidad. Gramaticalmente hablando, es intrascendente. Pero doctrinalmente es de gran importancia entender cabalmente las implicancias de esta palabra en plural.
[14] En estas páginas, como en el curso de hebreo básico funcional, se prefiere utilizar la forma Yahwêh ‘Elohîm para verter el hebreo יְהוָה אֱלֹהִם, pero por rezones puramente gramaticales y literarias. La común traducción Jehová Dios que aparece en la Versión Reina-Valera, por ejemplo, es gramaticalmente errónea, pero acceptable, y no puede ser criticada ni rechazada, a menos que uno critique y rechace las formas latinizadas Jesús, Jeremías, Isaías, Zacarías, Ezequiel, Juan, etc., que se usan comúnmente en castellano. Por lo tanto, la preferencia por la forma Yahwêh ‘Elohîm no puede ser vista ni considerada como un rechazo a otras formas que emplean el Nombre Inefable de Dios en las Escrituras. Tampoco puede ser considerada como un apoyo o rechazo a doctrinas o enseñanzas religiosas relacionadas con el Nombre.
[15] Todas estas declaraciones son hechas desde el punto de vista de lo doctrinal y no tienen, necesariamente, implicancias ni bases en lo gramatical, que es lo que concita la atención central de este curso. Como se ha dicho en múltiples ocasiones, este curso no intenta ni pretende, en modo alguno, introducir revisiones ni críticas de especie alguna a las doctrinas o enseñanzas religiosas. El campo del traductor es uno, y el campo del exegeta o intérprete de las Escrituras es otro. Cuando de doctrinas se trata lo que entra a primar es la revelación que ha sido dada y los medios por los cuales se conduce tal revelación. Y quien discute las doctrinas y enseñanzas desde los varios puntos de vista es el intérprete o exegeta. El traductor no puede ni debe invadir el campo del intérprete o exegeta. Y viceversa.
[16] De nuevo, creo necesario aclarar que no hay ánimo en estas palabras de establecer doctrina ni de apoyar o rechazar las posiciones doctrinarias de nadie ni de ninguna organización religiosa. Es una referencia necesaria solamente para ejemplificar la manera en que una corriente de pensamiento considera el tema.
[17] Para un análisis más pormenorizado, desde el punto de vista estrictamente gramatical, véase la lección número 6 de este curso, El Hebreo Bíblico. Un análisis todavía más profundo se presenta en la lección número 11, Gramática en Génesis 1:1.
[18] http://service.bfast.com/bfast/click/parsonstech?sourceid=575064&bfpid=4224&bfmtype=software.
[19] Básicamente, para quien desee progresar en el estudio del hebreo, será necesaria alguna gramática hebrea y una edición interlineal de la Biblia Hebrea, óptimamente hebreo-español. Los títulos que pueden ser de gran ayuda se mencionarán en las respectivas lecciones de este curso.
[20] Enseñanzas del Profeta José Smith, selecciones de sus sermones y escritos, compiladas, escogidas y arregladas por José Fielding Smith, Historiador de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últrimos Días, tomadas de la Historia Documental de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últrimos Días, así como de obras escritas o publicadas en los días del ministerio del profeta José Smith, traducida al español bajo la dirección del Comité Misionero de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últrimos Días por Eduardo Balderas, publicación de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, Salt Lake City, Utah, EE. UU., 1975.
[21] Nota al pie en la obra citada: “Es decir, el uso de la palabra ‘abogado’ sin explicación.” Enseñanzas del Profeta José Smith, página 431.
[22] Esta palabra casi, entre corchetes, no aparece en el original que escribió el Profeta, pero el editor consideró necesario agregarla por considerar que el Profeta entendía que la que había estado revisando era “la traducción casi más correcta”, porque ninguna es correcta, debido a que no es inspirada, sino obra de eruditos y escriturarios que no han tenido todas las herramientas a su alcance para efectuar un buen trabajo de traducción desde las lenguas originales de la Biblia a las versiones modernas. Sin embargo, quizá lo mejor hubiera dejado la frase sin añadirle nada, para que no aparezca como que se está intentando tergiversar o torcer lo que escribió el Profeta José Smith. ¿Qué quiso decir realmente el Profeta con esta frase?
[23] Estas palabras aparecen en la obra citada para aclarar que el Profeta se está refiriendo a una versión inglesa del Nuevo Testamento.
[24] El nombre en español Santiago es una contracción de la frase Sant Iaco, Sant Iago, esto es, San Jacob o San Jacobo. El nombre español Jaime está relacionado directamente con el inglés James, y quiere decir lo mismo, Jacob, por lo tanto, los nombres James, Jaime y Santiago traducen el mismo nombre hebreo, Yakob, latinizado en Jacob o Jacobo.
[25] Esta declaración del Profeta se refiere a la importancia de usar los nombres correctos en toda ocasión, ya que el uso de nombres distintos a los verdaderos no surten el efecto que se espera. Este principio es observado en la actualidad principalmente entre los judíos mesiánicos, por ejemplo, quienes insisten en usar los nombres y las pronunciaciones hebreos en forma cotidiana, llegándose incluso al extremo de polemizar en cuanto a la verdadera grafía y pronunciación de palabras y nombres que a la mentalidad occidental parecería superfluo.
[26] “El concepto del Profeta sobre este tema de la creación ha sido abundantemente corroborado por los hombres instruídos que han vivido después de él. El distinguido profesor Baden-Powell de la Universidad de Oxford, por ejemplo, en un artículo que escribió para la Cyclopedia of Biblical Literatura (Enciclopedia de Literatura Bíblica) de Kitto, dice lo siguiente: “El significado de esta palabra (crear) comúnmente se ha asociado con el concepto de hacer algo de la nada. Pero si deseamos escudriñar con más exactitud el tema, por supuesto, sólo quedaremos satisfechos en cuanto al significado cuando examinemos la frase original.” El erudito profesor entonces explica que se emplean en distintos lugares tres diferentes verbos hebreos que se refieren al mismo hecho divino, y pueden ser traducidos, respectivamente, “crear”, “hacer”, “formar o constituir”. “Aunque en cada una de estas voces hay una pequeña distinción—sigue diciendo el profesor—es casi tan perfecta su sinonimia, según los mejores críticos, que en lo que respecta a la idea de hacer algo de la nada, por lo menos, es poco, si acaso lo hay, el apoyo que para esta doctrina se puede inferir del primero de estos términos. Y por supuesto, si no hay fundamento o apoyo para la doctrina, en la primera de estas palabras, a saber, el verbo que ha sido traducido por “crear”, entonces hay menos probabilidad de que haya fundamento para la doctrina de crear algo de la nada, en el verbo que ha sido traducido “hecho”, “formado” o “constituído”.
“El ilustre profesor añade: “El concepto de que ‘creación’ significa absolutamente hacer algo de la nada, o dar existencia a lo que no existía antes, en el sentido más preciso de la palabra, no es doctrina de las Escrituras; pero muchos la han sostenido apoyándose en la teología natural, porque pone de relieve las ideas que nos formamos del poder divino, y más especialmente en vista de que una opinión contraria debe inferir la creencia de que la materia es eterna y de sí existente.”
“El renombrado Diccionario Bíblico del doctor Guillermo Smith (editado por Hackett en 1894) no contiene ningún artículo sobre el término “crear” o “creación”, pero en el artículo “tierra” hallamos referencia al tema, y realmente la explicación, por inferencia, de porqué la obra no contiene ningún tratado sobre “crear” o “creación”. Dice así: “El hecho mismo de la creación, cual se halla en el primer capítulo de Génesis, es un tema que sobrepuja en gran manera la experiencia del hombre; el lenguaje humano, que como originalmente ocurrió, se deriva del mundo sensible y material, no puede hallar un término adecuado para describir el hecho; porque nuestra palabra ‘crear’ y el hebreo bara, aunque adecuadamente expresan la idea de una creación original, sin embargo, pueden aplicarse, y por fuerza se aplican a otras formas de creación; y los aditamentos de expresiones tales como ‘de cosas que no eran’ o ‘de cosas que no se ven’ no aumentan mucho la fuerza de la declaración. La falta de una palabra que pueda describir exclusivamente una creación original es debilidad necesaria del idioma; pues como los acontecimientos no ocurrieron sino una vez, el término correspondiente, para poder ser adecuado, tendría que haber sido inventado y reservado sólo para la ocasión, cosa que habría sido imposible.
“Los filósofos apoyan la proposición del Profeta con el mismo énfasis. Herbert Spencer en su obra, First Principles (Los Primeros Principios) (1860) dijo:
“’En un tiempo fue universalmente común la noción de que una cosa podía desaparecer en una nada absoluta, o aparecer de una nada absoluta . . Ha influído de una manera palpable en la religión del día, en sus enseñanzas concernientes al principio y el fin del mundo . . La acumulación gradual de los experimentos lentamente ha tendido a corregir esta convicción, hasta que hoy, la doctrina de que la materia es indestructible es conocimiento común. Ante un conocimiento mayor, han desaparecido, una por una, todas las pruebas aparentes de que algo puede resultar de la nada. Se ha comprobado que el cometa, que repentinamente se descubre en los cielos, y noche tras noche aumenta en tamaño, no es un cuerpo recién creado, sino un astro que hasta hace poco no alcanzábamos a ver. La nube que en el término de unos cuantos minutos se forma en el cielo, no se compone de una substancia que comienza a existir, sino de una substancia que ya existía previamente en una forma más difusa y transparente. Igual cosa sucede con un cristal o un precipitado, respecto del fluído que lo deposita. Por otra parte, la aparente aniquilación de la materia resulta ser, mediante una observación más minuciosa, sólo un cambio de estado. Se ha descubierto que el agua evaporada, aunque se ha tornado invisible, puede hacerse volver a su forma original por medio de la condensación. La escopeta que es disparada ofrece evidencia de que aunque la pólvora se consume, en lugar de ella aparecen ciertos gases, que al dilatarse, han causado la explosión.’
“En su Cosmic Philosophy (Filosofía Cósmica) Juan Fiske, que vivió algunos años después de Spencer, compendia el asunto en estas palabras: “Hoy es inconcebible que una partícula de materia llegue a existir espontáneamente, o deje de tener existencia.”
“Roberto Kennedy Duncan (1905) en su libro New Knowledge (Conocimiento Nuevo) dice: ‘Hay una grande ley fundamental que gobierna la materia en toda su variedad de formas, y que hasta ahora ha sido inflexible en su carácter. Esta ley, conocida como la ley de la conservación de la masa, declara que ni una sola partícula de materia, por pequeña que sea, puede ser creada o destruída. Ni el rey más poderoso con toda su potencia puede destruir un alfiler. Podremos aplastarlo, disolverlo en el ácido, quemarlo en un horno eléctrico, en una palabra, emplear todas las agencias destructoras, y sin embargo, ese alfiler persiste en existir. Además, es tan imposible crearlo como destruírlo. En otras palabras, no podemos crear algo de la nada. Debe proveerse la materia para todo artículo que vaya a existir. La suma de la materia del universo es x libras, y aunque pase por millares de formas, al fin de todo, no pasa de x libras.’ —Notas del hermano B. B. Roberts.” (nota en el original citado.).
[27] “Los elementos son eternos, y espíritu y elemento, inseparablemente unidos, reciben una plenitud de gozo . . Los elementos son el tabernáculo de Dios; sí, el hombre es el tabernáculo de Dios, aun templos.” D. y C. 93:33, 35. (Nota en el original citado.).
[28] http://service.bfast.com/bfast/click/parsonstech?sourceid=575064&bfpid=4224&bfmtype=software.
[29] http://www.amazon.com/exec/obidos/ASIN/1565632060/hebrewlanguagere.
[30] http://www.amazon.com/exec/obidos/ASIN/0310417414/hebrewlanguagere.
[31] http://www.netwaysglobal.com/hebrew.
[32] http://www.netwaysglobal.com/biblia.
[33] http://www.farmsresearch.com.
[34] http://www.amazon.com/exec/obidos/ASIN/1878442821/hebrewlanguagere/o/qid=989856239/sr=2-2/104-2650217-8198306.
[35] http://advance.byu.edu/devo.html.